Un niño se sentó en un banco y se encontró con la amargura. “Y tú, ¿quién eres?” preguntó. “La amargura” “¿Y eso? Nunca lo había oído” “Eres muy pequeño para entenderlo. Mejor así”. El niño, haciendo honor a su estatura, …
Un niño se sentó en un banco y se encontró con la amargura. “Y tú, ¿quién eres?” preguntó. “La amargura” “¿Y eso? Nunca lo había oído” “Eres muy pequeño para entenderlo. Mejor así”. El niño, haciendo honor a su estatura, …