Últimamente me cuesta escribir. Me cuesta mucho. Y sufro una sensación de vacío difícil de superar. No sé si ha sido que de pronto me he encontrado descolocada ante la falta de la presión que marca un …
Tengo miedo, lo siento. Un miedo aterrador. Ni un ápice de gracia recorre mi mente y escribo mientras compruebo que sin yo quererlo mis palabras se tiñen de naranja. El color del horror. Calificativo hasta ahora impensable para esta tonalidad …
Empecé ayer. ¿O fue antes de ayer? Ya no me acuerdo, porque cada vez que se acerca la hora de hacer las maletas -da igual que sea para dos días, diez, o un mes- el estómago se me encoge y …
Es la primera vez que escribo en el blog sin que sea la misma columna que escribo en el periódico. Es la primera vez, que a pesar de lo cansada que estoy –que lo estoy- siento la necesidad de compartir …
Desperté con su mirada perdida clavada en mis ojos y desde entonces no consigo conciliar el sueño. Tengo miedo. Mi agonía empezó el pasado sábado. Sin romper mi rutina habitual, antes de ser persona y en versión autómata, me dirigí …